Es ideal para niños de 4, 5, 6 y 7 años.

Cada una de las tareas presenta una secuencia de imágenes en la pantalla que juntas cuentan una historia, pero las imágenes se mezclan al principio de la ronda. El niño tiene que colocar las imágenes en el orden correcto y contar la historia que muestran. El juego entrena eficazmente la capacidad de hablar con frases completas y significativas, así como de llegar a conclusiones lógicas basadas en hechos observados. Para colocar las imágenes en el orden correcto, los niños tienen que establecer primero relaciones causales, temporales, espaciales y otras relaciones lógicas entre las piezas más pequeñas y demostrar un nivel de abstracción bastante alto. El propio examen de las imágenes entrena la atención y la concentración.

Pide a tu hijo que cuente una historia corta o que explique de algún modo por qué las imágenes deben estar en ese orden, así como lo que ocurre en ellas. Cada historia tiene un principio, luego un desarrollo y, por último, un final. Todas las imágenes son realistas, coloridas y están dirigidas a niños pequeños.

El juego ofrece tareas con 3 niveles de dificultad:

1. Fácil - secuencias de 4 imágenes fáciles (por ejemplo, 1. Manzana entera, 2. manzana mordida, 3. manzana a medio comida, 4. corazón de la manzana).
2. Medio - secuencias de 4 imágenes que juntas forman una pequeña historia con un argumento sencillo.
3. Difícil - secuencias de 5-6 imágenes con una trama más larga en las que el niño necesita establecer relaciones temporales y causales.